Tocaba rescatar un clásico, y aún me faltaba comentar una película de Hitchcock. Y una de mis favoritas del director es La soga.
En ella, dos jóvenes, han asesinado a uno de sus amigos, por el puro placer de conseguir el crimen perfecto. Para rematar la jugada, han invitado amigos, la novia, el padre y la tía del cadáver, y a un antiguo profesor, con el que mantenían amenas discusiones filosóficas y sobre la teoría de Nietzsche de Superhombre. Sirven la comida encima de un arcón, que es donde han escondido al muerto, y la tensión va creciendo entorno al mueble.
Adaptación de una obra teatro, la película se construye entorno a un solo escenario, y practicamente un único plano (aunque se ayude del fundido en las espaldas de los protagonistas para pasar de un plano a otro), a lo largo de toda la película. Esto aparte de darle un sentido muy teatral a la película, demuestra como se puede hacer buen cine, con poco presupuesto y en unos pocos días.
La película esta concevida magistralmente, pues sabemos desde el principio lo que ha pasado con el amigo que no llega a la fiesta, pero mantiene la tensión en todo momento por ver si alguno de los invitados descubre el crimen. Y es donde James Stewart se luce, encarnado al antiguo profesor, y poniendo nerviosos a los criminales con sus continuas pesquisas.
Como se puede entender, esta es una película de actores, donde destaca sobremanera Stewart, completando el trío protagonista junto a John Dall, con un perfecto irónico y convincente asesino de sangre fría, y a Farley Granger, que si bien es el que más adolece su interpretación, también da la talla como criminal arrepentido.
Contiene escenas de gran maestría, como en la que que Dall, recoge la cuerda en la cocina, o la tensión que se crea entorno al arcón, mientras vemos como la sirvienta va recogiendo la mesa y va acercando libros para recogerlos en el maldito mueble. Esta escena sin duda es una de las que más se puede recordar de la película.
Un acierto de película, donde se tocan no solo las teorías del crimen perfecto, sino que se crítica ferozmente la ideas de partida del nacionalsocialismo de Hitler, que sin duda eran tema de la época (recordemos que esta rodado en 1948).
Una película que no puede faltar a nadie, y que recomiendo encarecidamente, pues es para disfrutar de buen cine, hecho con cabeza, y con una tensión constante a lo largo de todo el film. Además a nadie se le hará larga, pues pasa en un suspiro de 80 minutos.
8 comentarios:
Jodo! Un buen clásico de Hitchcock para comenzar el año. Feliz 2011 Serreina.
Personalmente tengo alguna anécdota personal con "La Soga", pero creo que si la cuento nadie la entendería ni le vería la gracia.
Un abrazo.
Vaya si que has sido rápido, y me quedo con la curiosidad sobre la anecdota, espero algún día me la cuentes.
Feliz año para ti también.
Un abrazo
La del plano secuencia con dos cortes disimulados, gran película de Hitchcock.
Me encantan las películas de hitchcock ,cada vez que veo una descubro un clásico imprescindible, saludos!
Me encanta Hichcock, y gracias por tu crítica me han dado ganas de revisarla.
Un saludo
Me alegra saber que aún me quedan buenas películas por ver como La Soga. Me la apunto !
Como bien dices de obligatorio visionado, que combina formidablemente momentos de tensión con la intriga. Otra de las genialidades de Hitchcock que sólo él era capaz de realizar de manera tan magistral.
Una gran película y una crítica muy buena, como siempre.
Un saludo!
Buena entrada y estupendo blog.
Esta película, aunque no es de las mejores de Hitchcock, tiene su punto. Eso de rodarla prácticamente en una habitación, y en un sólo plano secuencia, no sólo es un ejercicio técnico de estilo atrevido sino una genialidad vistos los resultados. Hasta otra, serreina
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