El gran Vázquez

Como gran devorador de tebeos en mi tierna infancia, esta película era obligatoria verla. Y dispuesto a llevarme un chasco, me sorprendió gratamente, aunque la película en si, se queda a medias de todo.

La película nos relata una parte de la biografía del dibujante de tiras cómicas Vázquez, creador de Anacleto, Las hermanas Gilda, o La familia Cebolleta entre otras. Su vida es la de un perfecto caradura, bigamo, y siempre con deudas a sus espaldas, por motivos no muy legales. La editorial Bruguera, es donde trabaja, y allí podemos ver a diferentes dibujantes contemporáneos de Vázquez, como Escobar, o Ibáñez. Su afán por el fraude y vivir la vida lo más fácil posible (aunque no se da cuenta que en realidad toma el camino más difícil), lleva a engañar a su empresa, lo que al final dará con sus pies en la cárcel, punto del que difícilmente logra recuperarse.

Como he dicho, la película se queda a medias de todo: no es una comedia al uso, pues los chistes y las situaciones graciosas, no son muchas. El drama tiene mucha presencia, pero acompañado de ese toque ligero de comedia, tampoco transmite todo lo que debería. Y tiene momentos en los que los dibujos de Vázquez, cobran vida, pero tampoco se trata de una película de animción con personajes reales.
Aún con todo resulta entretenida, y es apasionante ver como este hombre va de lío en lío, y como le complica la vida a todos los que le rodean.

Los actores, son lo mejor de la película. Santiago Segura encarna a un perfecto Vázquez, y logra el mejor papel hasta ahora de su carrera, y además lo suficientemente contenido y alejado de Torrente. Álex Angulo, es junto a Enrique Villén, los que mejor están en la película, pues se muestran muy reales, y son personajes llenos de contracciones, en lucha contra el espíritu libre de Vázquez. La actriz de la película es Merce Llorens, que tampoco lo hace mal, y se lleva los momentos más emocionantes de la película.

Por otro lado, esta la ambientación, que no se si esta hecho a idea, pero tiene un tufillo a cartón piedra, que entona muy bien con el ambiente de tebeo de la película.

Tiene grandes escenas, pero para mi la mejor es en la que Segura le propone a Llorens, colarse en el Palace de Barcelona, y en contra de lo que puede parecer, acepta, y forman un buen lío en el hotel, para semanas después escapar sin pagar la factura.

En definitiva, una película que resulta entretenida, pero que podría haber estado mucho mejor, pues disponía de un material muy rico en muchos matices, y es una pena que se quede a medias de todo (por ejemplo, me habría gustado saber más del trabajo que se realizaba en la mítica editorial, pues parece que no era todo lo correcto que parecía a través de sus tebeos).

La recomiendo, sobre todo si eres de los que leían sus historietas. Y por supuesto, dejar los prejuicios a un lado sobre Santiago Segura, pues esta lo suficientemente contenido y apartado de los personajes que suele hacer.