De nuevo, he pensado en una nueva lista, y el revisionado de la primera parte de la trilogía de El señor de los Anillos, así como la entrada que hace poco hizo el amigo Snake en su blog Tierra de Cinefágos, me ha animado para hacer una selección con las que considero son las mejores muertes en el cine. Como siempre os digo, esta es mi pequeña selección, pero seguro que me he dejado muchas en el tintero, así que os animo a los comentarios para dar más ideas.
5. El precio del poder (Scarface). Una película mítica, y con un intenso y recordado final. En esta escena , tenemos una de las más impactantes muertes del cine. Dirige Brian de Palma, con un guión de Oliver Stone, y con Al Pacino y Michelle Pfeiffer, en estado de gracia:
4. Pulp Fiction: Película amada y odiada a partes iguales, y sin duda, lo que es seguro es que no deja indiferente. Entre las muchas muertes que contiene la película, sin duda la más recordada es la muerte accidental en el coche conducido por Jackson, a manos de Travolta:
3.Platoon: Gran película, con una banda sonora que a mi me pone los pelos de punta. Y otra de las muertes más recordadas: la de Elias:
2. El caballero oscuro: Una de las escenas más impactantes que nos dejo el difunto Ledger, fue el asesinato con un lápiz:
1. El señor de los anillos: La comunidad del anillo. Una escena que deja sin palabras, la muerte de Boromir, con ella, con tanto honor, sus pecados hacía el anillo, quedan perdonados. Disfrutadla:
martes, 29 de mayo de 2012
domingo, 27 de mayo de 2012
Rayo negro (Black Lightning)
La verdad, hace tiempo que vi esta película, y no la vi merecedora de ganarse una reseña. Pero el otro día me acorde de ella, al ver uno de los trailers del nuevo Spiderman, y la recuerdo con cariño, aunque no sea una gran peli.
La película es rusa, y desconozco a los dos directores, y al reparto, no son caras conocidas internacionalmente, aunque me figuro que sí en su país, algo así como si le das al extranjero, una peli con actores españoles de Fuga de cerebros y cosas similares.
La película, supongo que es un intento de saltar al mercado internacional, pues el despliegue de medios en efectos especiales, es abrumador, así como el argumento del film, que huye de los localismos, salvo para las estupendas localizaciones.
El problema que tiene, es que recuerda demasiado al Spiderman de Sam Raimi. Muchos paralelismos a esta película, que no se quedan en una escena u otra, sino en todo el argumento de la peli, pues si cambias coche por araña, tendríamos la copia rusa de Spiderman.
Un chico de instituto, se encuentra por casualidad con un coche que entre sus muchos gadgets, se encuentra la posibilidad de volar. En cuanto empieza a saber manejarlo, se va convirtiendo poco a poco en un superhéroe. A partir de hay, podríamos contar la película de Spidey, y sería la misma, desde la perdida de un familiar por culpa del protagonista, la novia, el amigo del instituto, el trabajo que tiene y su jefe,...
Aunque todo esto, no significa, que la peli sea mala o aburrida, pero tampoco buena, del montón, válida para una tarde tonta sin saber que hacer, e incluso para ver con la familia. Eso sí, hay que ser muy indulgentes con ella, y así hasta le cogeréis el cariño que le he cogido yo con el tiempo, aunque no se si volveré a verla algún día, pues tampoco es tanto cariño, sino más bien compasión por el trabajo que le han dedicado, y que se nota se han esforzado por sacar una película de gran presupuesto, y que sea digna de su país, así como de colocarla de alguna manera en el mercado internacional, aunque en esto claramente fracaso.
Por lo tanto, no es de visionado obligatorio, pero se puede guardar en la recamara, para cuando no hay nada mejor que hacer.
La película es rusa, y desconozco a los dos directores, y al reparto, no son caras conocidas internacionalmente, aunque me figuro que sí en su país, algo así como si le das al extranjero, una peli con actores españoles de Fuga de cerebros y cosas similares.
La película, supongo que es un intento de saltar al mercado internacional, pues el despliegue de medios en efectos especiales, es abrumador, así como el argumento del film, que huye de los localismos, salvo para las estupendas localizaciones.
El problema que tiene, es que recuerda demasiado al Spiderman de Sam Raimi. Muchos paralelismos a esta película, que no se quedan en una escena u otra, sino en todo el argumento de la peli, pues si cambias coche por araña, tendríamos la copia rusa de Spiderman.
Un chico de instituto, se encuentra por casualidad con un coche que entre sus muchos gadgets, se encuentra la posibilidad de volar. En cuanto empieza a saber manejarlo, se va convirtiendo poco a poco en un superhéroe. A partir de hay, podríamos contar la película de Spidey, y sería la misma, desde la perdida de un familiar por culpa del protagonista, la novia, el amigo del instituto, el trabajo que tiene y su jefe,...
Aunque todo esto, no significa, que la peli sea mala o aburrida, pero tampoco buena, del montón, válida para una tarde tonta sin saber que hacer, e incluso para ver con la familia. Eso sí, hay que ser muy indulgentes con ella, y así hasta le cogeréis el cariño que le he cogido yo con el tiempo, aunque no se si volveré a verla algún día, pues tampoco es tanto cariño, sino más bien compasión por el trabajo que le han dedicado, y que se nota se han esforzado por sacar una película de gran presupuesto, y que sea digna de su país, así como de colocarla de alguna manera en el mercado internacional, aunque en esto claramente fracaso.
Por lo tanto, no es de visionado obligatorio, pero se puede guardar en la recamara, para cuando no hay nada mejor que hacer.
jueves, 24 de mayo de 2012
Soy leyenda
Una película estupenda, tercera adaptación de la novela de Richard Matheson, y que tiene dos partes muy diferenciadas.
Como sabéis, pues la película no es reciente, y seguro que habéis visto alguna de las otras dos adaptaciones, estamos ante un futuro próximo, donde una cura contra el cáncer, ha derivado en un peligroso virus, que eliminado prácticamente a toda la humanidad, y ha dejado tras de sí, a unos infestados que son una especie de mitad zombie, y mitad vampiro. Will Smith, es Robert Neville, un científico que vive solo en Nueva York, con la única compañía de su perra, y que entre las necesarias rutinas diarias de supervivencia, intenta encontrar una cura para el virus.
Dirigida por Francis Lawrence, y magnífica interpretada por Will Smith, la película tiene una primera parte soberbia, donde se retrata muy bien la soledad que siente Smith, dentro de un mundo casi vacío, y con unos supervivientes nocturnos muy peligrosos. Esta escenas, están llenas del reflejo del limite de la cordura por la que esta atravesando el doctor Neville, y merecen estar entre lo más alto en cuanto al genero de la ciencia ficción se refiere. Por ejemplo, el rescate de la perra en el edificio infestado de los cuasi-zombies, es una de las que más tensión pueden provocar de lo filmado últimamente, así como la triste escena de despedida de Smith a su compañera de fatigas, donde el actor, lo borda y demuestra el gran talento que tiene para la interpretación.
El problema viene en la segunda parte, con la llegada de dos nuevos supervivientes, donde todo se precipita y se llena de incoherencias de guión. Y son unas incoherencias terribles, pues es inexplicable, como han podido llegar a la isla de Manhattan y además poder salir de ella, si en su día, se volaron todos los puentes que la unían al continente, dejándola aislada. Quizá tiene su explicación, pero no es contado ni demostrado en la película.
La edición en DVD, nos trajo además un final alternativo, muy superior al que se mostro en cines, y que también tiene la temida incoherencia del aislamiento.
Aún con todo, la película merece mucho la pena, por la primera hora de metraje, y su bajada de calidad en la última media hora, no es suficiente para desdeñar esta película. Así que si aún no habéis visto la película, os la recomiendo.
Por cierto, llegan rumores de una segunda parte de esta película, que supongo estarán basados en el final alternativo, y no el mostrado en cines, porque sino, a mi que me expliquen como puede continuar, a no ser que cambien a todos los protagonistas.
Como sabéis, pues la película no es reciente, y seguro que habéis visto alguna de las otras dos adaptaciones, estamos ante un futuro próximo, donde una cura contra el cáncer, ha derivado en un peligroso virus, que eliminado prácticamente a toda la humanidad, y ha dejado tras de sí, a unos infestados que son una especie de mitad zombie, y mitad vampiro. Will Smith, es Robert Neville, un científico que vive solo en Nueva York, con la única compañía de su perra, y que entre las necesarias rutinas diarias de supervivencia, intenta encontrar una cura para el virus.
Dirigida por Francis Lawrence, y magnífica interpretada por Will Smith, la película tiene una primera parte soberbia, donde se retrata muy bien la soledad que siente Smith, dentro de un mundo casi vacío, y con unos supervivientes nocturnos muy peligrosos. Esta escenas, están llenas del reflejo del limite de la cordura por la que esta atravesando el doctor Neville, y merecen estar entre lo más alto en cuanto al genero de la ciencia ficción se refiere. Por ejemplo, el rescate de la perra en el edificio infestado de los cuasi-zombies, es una de las que más tensión pueden provocar de lo filmado últimamente, así como la triste escena de despedida de Smith a su compañera de fatigas, donde el actor, lo borda y demuestra el gran talento que tiene para la interpretación.
El problema viene en la segunda parte, con la llegada de dos nuevos supervivientes, donde todo se precipita y se llena de incoherencias de guión. Y son unas incoherencias terribles, pues es inexplicable, como han podido llegar a la isla de Manhattan y además poder salir de ella, si en su día, se volaron todos los puentes que la unían al continente, dejándola aislada. Quizá tiene su explicación, pero no es contado ni demostrado en la película.
La edición en DVD, nos trajo además un final alternativo, muy superior al que se mostro en cines, y que también tiene la temida incoherencia del aislamiento.
Aún con todo, la película merece mucho la pena, por la primera hora de metraje, y su bajada de calidad en la última media hora, no es suficiente para desdeñar esta película. Así que si aún no habéis visto la película, os la recomiendo.
Por cierto, llegan rumores de una segunda parte de esta película, que supongo estarán basados en el final alternativo, y no el mostrado en cines, porque sino, a mi que me expliquen como puede continuar, a no ser que cambien a todos los protagonistas.
domingo, 20 de mayo de 2012
Bunraku
Sí para mi The Spirit, supuso una de las películas más soporíferas y sin sentido que he visto (bueno, en realidad, no he podido ni terminar de verla), esta le sigue de cerca, con la salvedad, de que esta la he terminado de ver.
Un tipo llamado Guy Moshe, es el que ha dirigido semejante obra sin sentido. Y la verdad, no se si merece la pena, ni siquiera hablar de su sinopsis, pues se limita a un videojuego de los malos, en los que para llegar al villano final, tienes que ir superando poco a poco, a villanos inferiores, pero peligrosos. Y entremedio, te tienes que divertir con los lacayos de estos supervillanos, que los hay a cientos, pero son torpes y poco peligrosos. En fin, la lucha entre el bien y el mal, aquí, encarnados en la clase proletaria, y los mafiosos.
Hasta la estética, recuerda a la olvidable The Spirit. Algo que si bien en la película que inauguro este tipo de secuencias, Sin City, se convierte en el acompañamiento perfecto al film, en algo tan desastroso como The Spirit, o esta Bunraku, se torna en evidenciar aún más el desastre.
Entre los actores, caras muy conocidas, que no hacen otra cosa que engordar su bolsillo, porque tampoco es que se lo curren mucho (aunque hay que decir, que poco podían hacer). Tenemos a Josh Hartner, Woody Harrelson, Demi Moore, Ron Perlman, y un Jordi Mollá, que muere a los cinco minutos (no pongo spoiler porque no merece la pena).
Incluso las escenas de lucha, que deberían ser lo mejor de la película, no se salvan, pues están demasiado coreografiadas, tanto que parecen bailes, y tan solo alguna por el final del metraje (si todavía aguantáis el visionado), merece la pena.
En definitiva, una estética muy moderna, llena de un vacío casi por completo, pues no se sujeta nada por su sitio, ni guión, ni actuación, ni montaje, ni dirección. Si la veis, haya vosotros. Y los que sois asiduos lectores de mi blog, sabéis que me cuesta mucho poner a una película tan mal, pero hay veces, que me es imposible aguantarme.
Un tipo llamado Guy Moshe, es el que ha dirigido semejante obra sin sentido. Y la verdad, no se si merece la pena, ni siquiera hablar de su sinopsis, pues se limita a un videojuego de los malos, en los que para llegar al villano final, tienes que ir superando poco a poco, a villanos inferiores, pero peligrosos. Y entremedio, te tienes que divertir con los lacayos de estos supervillanos, que los hay a cientos, pero son torpes y poco peligrosos. En fin, la lucha entre el bien y el mal, aquí, encarnados en la clase proletaria, y los mafiosos.
Hasta la estética, recuerda a la olvidable The Spirit. Algo que si bien en la película que inauguro este tipo de secuencias, Sin City, se convierte en el acompañamiento perfecto al film, en algo tan desastroso como The Spirit, o esta Bunraku, se torna en evidenciar aún más el desastre.
Entre los actores, caras muy conocidas, que no hacen otra cosa que engordar su bolsillo, porque tampoco es que se lo curren mucho (aunque hay que decir, que poco podían hacer). Tenemos a Josh Hartner, Woody Harrelson, Demi Moore, Ron Perlman, y un Jordi Mollá, que muere a los cinco minutos (no pongo spoiler porque no merece la pena).
Incluso las escenas de lucha, que deberían ser lo mejor de la película, no se salvan, pues están demasiado coreografiadas, tanto que parecen bailes, y tan solo alguna por el final del metraje (si todavía aguantáis el visionado), merece la pena.
En definitiva, una estética muy moderna, llena de un vacío casi por completo, pues no se sujeta nada por su sitio, ni guión, ni actuación, ni montaje, ni dirección. Si la veis, haya vosotros. Y los que sois asiduos lectores de mi blog, sabéis que me cuesta mucho poner a una película tan mal, pero hay veces, que me es imposible aguantarme.
miércoles, 16 de mayo de 2012
The Artist
Llego tarde, y como casi siempre, ya se ha dicho todo sobre esta película, pues se ha hablado mucho y no es para menos habiéndose llevado 5 Oscars.
La verdad, es que tenía mis reticencias a ver la película, no me podía creer lo que leía, pues me parece increíble que una película muda, haya cautivado a espectadores y crítica, en plena era de Internet y del cine en 3D.
Y no podía estar más equivocado, la película, también me ha cautivado, cierto es que no cuenta nada nuevo, y que si miramos el cine de la época que trata de reflejar, esta sería una más del montón (hace mucho que no veo una peli muda, pero puedo decir que he visto unas cuantas, aunque me tenga que retrotaer mucho en el tiempo), pero enamora.
Estamos en las puertas de la llegada del cine sonoro, y George Valentin (Jean Dujardin), es una de las más grandes estrellas del cine mudo. Su orgullo, le impide creer en el cine hablado, y rechaza las propuestas del estudio que le tiene contratado para aparecer en ellas, así que cuando la empresa para la que trabaja decide cancelar todos los proyectos mudos, para centrarse en los sonoros, Valentin cae en el olvido. Esto acompañado por la gran crisis del 29, hacen que George, pase de ser una mega estrella, ha casi tener que mendigar. En medio esta Peppy Miller (Bérénice Bejo), una figurante de cine mudo, que gracias a una anécdota en prensa con el propio Valentin, ve despegar su carrera como actriz, entrando de lleno en el cine sonoro, y siendo una de sus mayores representantes.
Como digo, la película enamora. Una historia sencilla, pero muy bien contanda con sus imagenes, escenas, pero sobretodo, gracias a los actores que aparecen en ella. Todos perfectos, y con un sobresaliente para sus dos protagonistas, Dujardin y Bejo. Ellos son los que a través de sus inmensas sonrisas, sus gestos, sus actitudes frente a la cámara, hacen que literalmente llenen la pantalla, y sean parte fundamental para el éxito de la película. Y como digo, el resto del cast, no se queda atras. entre ellos podemos destacar: James Cromwell, John Goodman, Penelope Ann Miller y Malcom Mcdowell en un breve papel.
No olvidar el gran artífice de todo esto, su director, y guionista, Michael Hazanavicius, que gracias a su empeño, y poner todo de su parte, ha podido darnos esta belleza de película.
Una película que te sorprenderá si aún no la has visto, entretenida de principio a fin. Moderna , pero a la vez clásica, y no dejes que el que sea muda te tire para atrás el verla. A mi me pasaba, y quedado prendado de ella. La recomiendo encarecidamente, no es un clásico instantáneo, pero si una gran película, que bien merece ser vista por todo aquel que ame el cine de cualquier manera.
La verdad, es que tenía mis reticencias a ver la película, no me podía creer lo que leía, pues me parece increíble que una película muda, haya cautivado a espectadores y crítica, en plena era de Internet y del cine en 3D.
Y no podía estar más equivocado, la película, también me ha cautivado, cierto es que no cuenta nada nuevo, y que si miramos el cine de la época que trata de reflejar, esta sería una más del montón (hace mucho que no veo una peli muda, pero puedo decir que he visto unas cuantas, aunque me tenga que retrotaer mucho en el tiempo), pero enamora.
Estamos en las puertas de la llegada del cine sonoro, y George Valentin (Jean Dujardin), es una de las más grandes estrellas del cine mudo. Su orgullo, le impide creer en el cine hablado, y rechaza las propuestas del estudio que le tiene contratado para aparecer en ellas, así que cuando la empresa para la que trabaja decide cancelar todos los proyectos mudos, para centrarse en los sonoros, Valentin cae en el olvido. Esto acompañado por la gran crisis del 29, hacen que George, pase de ser una mega estrella, ha casi tener que mendigar. En medio esta Peppy Miller (Bérénice Bejo), una figurante de cine mudo, que gracias a una anécdota en prensa con el propio Valentin, ve despegar su carrera como actriz, entrando de lleno en el cine sonoro, y siendo una de sus mayores representantes.
Como digo, la película enamora. Una historia sencilla, pero muy bien contanda con sus imagenes, escenas, pero sobretodo, gracias a los actores que aparecen en ella. Todos perfectos, y con un sobresaliente para sus dos protagonistas, Dujardin y Bejo. Ellos son los que a través de sus inmensas sonrisas, sus gestos, sus actitudes frente a la cámara, hacen que literalmente llenen la pantalla, y sean parte fundamental para el éxito de la película. Y como digo, el resto del cast, no se queda atras. entre ellos podemos destacar: James Cromwell, John Goodman, Penelope Ann Miller y Malcom Mcdowell en un breve papel.
No olvidar el gran artífice de todo esto, su director, y guionista, Michael Hazanavicius, que gracias a su empeño, y poner todo de su parte, ha podido darnos esta belleza de película.
Una película que te sorprenderá si aún no la has visto, entretenida de principio a fin. Moderna , pero a la vez clásica, y no dejes que el que sea muda te tire para atrás el verla. A mi me pasaba, y quedado prendado de ella. La recomiendo encarecidamente, no es un clásico instantáneo, pero si una gran película, que bien merece ser vista por todo aquel que ame el cine de cualquier manera.
domingo, 13 de mayo de 2012
La chispa de la vida
La última película de Alex de la Iglesia, y la primera tras haber abandonado el cargo de presidente de la academia de cine. Un drama con ciertos toques de comedia, que se transforma en una crítica a los programas basuras de la televisión, y en concreto a los de determinada cadena española, que queda bien claro con su "Antena 5".
Roberto (José Mota), es un publicista en paro, que tras su última y fracasada entrevista de trabajo, se desplaza a Cartagena, para localizar el hotel en el que paso la luna de miel hace 20 años junto a su esposa. El hotel ha desaparecido, pues se han encontrado unas ruinas romanas en la zona, y todo ha quedado convertido en un Museo. Allí, sufre una caída accidental que le deja la cabeza atravesada por una barra de hierro. Quedando consciente, y tras llegar los servicios médicos y toda la prensa, empieza a pensar que el espectáculo que esta dando, puede ser aprovechado para relanzar su carrera y su vida.
Aunque en un principio, la película parece ser un reflejo de la sociedad actual de crisis en que vivimos (por lo del para), la película gira por completo en cuanto Roberto, es consciente de que puede aprovechar los medios, hacia la crítica sobre la telebasura. Una crítica, que sin duda se queda corta, pues cierto panorama televisivo español, da pena, y sin duda supera lo que se nos muestra en la película. Y desde luego, también contiene algo novedoso en el cine de Alex de la Iglesia, y es el amor familiar. Esto queda perfectamente reflejado, y resulta del todo convincente, a pesar de estar encarnado por personas tan diferentes como José Mota y Salma Hayek.
La elección de los protagonistas, no ha podido ser más acertada. Por un lado José Mota, aunque no borda su interpretación, desde luego demuestra ser un capaz actor dramático. De hecho, los pocos momentos cómicos que corren a lo largo del film, no parten de su personaje. Y Salma Hayek, esta perfecta y creíble como amante esposa de Mota. En el resto del amplio cast, podemos destacar a Juan Luis Galiardo (actor que no me podía imaginar nombrarlo en este blog), Blanca Portillo, Fernando Tejero, Antonio Garrido y Carolina Bang. Ademas. la película e ha nutrido con un montón de cameos, con actores muy populares del cine español, y que os animo a ir descubriendo.
En definitiva, una película que empieza siendo una cosa, y acaba en otra muy distinta, y que a pesar de no resultar redonda, bien merece un visionada, a lo que ayuda que a penas supere la hora y media de metraje.
Roberto (José Mota), es un publicista en paro, que tras su última y fracasada entrevista de trabajo, se desplaza a Cartagena, para localizar el hotel en el que paso la luna de miel hace 20 años junto a su esposa. El hotel ha desaparecido, pues se han encontrado unas ruinas romanas en la zona, y todo ha quedado convertido en un Museo. Allí, sufre una caída accidental que le deja la cabeza atravesada por una barra de hierro. Quedando consciente, y tras llegar los servicios médicos y toda la prensa, empieza a pensar que el espectáculo que esta dando, puede ser aprovechado para relanzar su carrera y su vida.
Aunque en un principio, la película parece ser un reflejo de la sociedad actual de crisis en que vivimos (por lo del para), la película gira por completo en cuanto Roberto, es consciente de que puede aprovechar los medios, hacia la crítica sobre la telebasura. Una crítica, que sin duda se queda corta, pues cierto panorama televisivo español, da pena, y sin duda supera lo que se nos muestra en la película. Y desde luego, también contiene algo novedoso en el cine de Alex de la Iglesia, y es el amor familiar. Esto queda perfectamente reflejado, y resulta del todo convincente, a pesar de estar encarnado por personas tan diferentes como José Mota y Salma Hayek.
La elección de los protagonistas, no ha podido ser más acertada. Por un lado José Mota, aunque no borda su interpretación, desde luego demuestra ser un capaz actor dramático. De hecho, los pocos momentos cómicos que corren a lo largo del film, no parten de su personaje. Y Salma Hayek, esta perfecta y creíble como amante esposa de Mota. En el resto del amplio cast, podemos destacar a Juan Luis Galiardo (actor que no me podía imaginar nombrarlo en este blog), Blanca Portillo, Fernando Tejero, Antonio Garrido y Carolina Bang. Ademas. la película e ha nutrido con un montón de cameos, con actores muy populares del cine español, y que os animo a ir descubriendo.
En definitiva, una película que empieza siendo una cosa, y acaba en otra muy distinta, y que a pesar de no resultar redonda, bien merece un visionada, a lo que ayuda que a penas supere la hora y media de metraje.
jueves, 10 de mayo de 2012
Los Descendientes
Melodrama contenido, dirigido por Alexander Payne, con un perfecto George Clooney como protagonista.
Clooney es Matt King, un abogado de Hawai, casado y que su mujer a sufrido un grave accidente y la ha dejado en coma irreversible. Sus dos hijas y él, se tienen que enfrentar al hecho de que van a quedarse huérfanas y viudo, mientras descubren el gran secreto que tenía la moribunda. Además, de por medio esta la herencia de la familia King, unos terrenos de los que deben desprenderse, y que no saben a que postor vender.
Como he dicho al principio, es un drama contenido. Me explico, todo esta en su justa medida, nada sobra, ni nada falta, ni se abusa de la lágrima fácil, ni se intentan santificar a las victimas de los hechos que están ocurriendo en la película. Todo es tratado con normalidad, todos los personajes son normales (salvo el tema de la millonaria herencia que poseen), y podrían ser tus vecinos o amigos. Ninguno de ellos sobrepasa el umbral, ni se les carga con tintes dramaticos, ni contienen los típicos cliches que podrían tener. El mejor ejemplo son las hijas. Una de ellas, Alexandra (Shailene Woodley), podría ser la típica adolescente rebelde, pasota de todo, y harta de su vida, pero no es así, y eso a pesar de que en un principio parece ser presentada de esa manera. Pronto Payne, le da un giro al personaje, y se vuelve completamente normal, adolescente, pero no exageradamente adolescente, sino fruto de los problemas que ha padecido con su madre. Lo mismo se puede decir de Clooney y su personaje. Muy fácil habría sido cargarle las culpas del distanciamiento familiar por su dedicación al trabajo, pero Payne, esta por encima de esto.
Clooney brilla en su actuación, y bien tendría que haberse llevado el Oscar por la película, y no quedarse en nominación. Elabora un personaje realista, muy creíble, y eso a pesar de parecer ser todo lo contrario a lo que su vida en la realidad es. Otro acierto del cast, son las dos hijas, Shailene Woodley y Amara Miller. La primera borda su papel de adolescente que sabe que va a tener que asumir muchas responsabilidades pronto, y la segunda, no carga las tintas para parecernos demasiado histriónica, y que no pega en la película, sino todo lo contrario, cumple con su papel a la perfección.
En definitiva, una película que aborda muchos sentimientos, y todos en su justa medida, amor, odio, comprensión, perdón,... y sin duda no me queda más que recomendaros la película.
Clooney es Matt King, un abogado de Hawai, casado y que su mujer a sufrido un grave accidente y la ha dejado en coma irreversible. Sus dos hijas y él, se tienen que enfrentar al hecho de que van a quedarse huérfanas y viudo, mientras descubren el gran secreto que tenía la moribunda. Además, de por medio esta la herencia de la familia King, unos terrenos de los que deben desprenderse, y que no saben a que postor vender.
Como he dicho al principio, es un drama contenido. Me explico, todo esta en su justa medida, nada sobra, ni nada falta, ni se abusa de la lágrima fácil, ni se intentan santificar a las victimas de los hechos que están ocurriendo en la película. Todo es tratado con normalidad, todos los personajes son normales (salvo el tema de la millonaria herencia que poseen), y podrían ser tus vecinos o amigos. Ninguno de ellos sobrepasa el umbral, ni se les carga con tintes dramaticos, ni contienen los típicos cliches que podrían tener. El mejor ejemplo son las hijas. Una de ellas, Alexandra (Shailene Woodley), podría ser la típica adolescente rebelde, pasota de todo, y harta de su vida, pero no es así, y eso a pesar de que en un principio parece ser presentada de esa manera. Pronto Payne, le da un giro al personaje, y se vuelve completamente normal, adolescente, pero no exageradamente adolescente, sino fruto de los problemas que ha padecido con su madre. Lo mismo se puede decir de Clooney y su personaje. Muy fácil habría sido cargarle las culpas del distanciamiento familiar por su dedicación al trabajo, pero Payne, esta por encima de esto.
Clooney brilla en su actuación, y bien tendría que haberse llevado el Oscar por la película, y no quedarse en nominación. Elabora un personaje realista, muy creíble, y eso a pesar de parecer ser todo lo contrario a lo que su vida en la realidad es. Otro acierto del cast, son las dos hijas, Shailene Woodley y Amara Miller. La primera borda su papel de adolescente que sabe que va a tener que asumir muchas responsabilidades pronto, y la segunda, no carga las tintas para parecernos demasiado histriónica, y que no pega en la película, sino todo lo contrario, cumple con su papel a la perfección.
En definitiva, una película que aborda muchos sentimientos, y todos en su justa medida, amor, odio, comprensión, perdón,... y sin duda no me queda más que recomendaros la película.
domingo, 6 de mayo de 2012
Misión Imposible: Protocolo Fantasma
La primera entrega fue brillante, la segunda, un autentico descalabro, la tercera recupero su esencia, y con esta cuarta entrega, se confirma que la saga esta muy viva, y que aún puede darnos películas muy entretenidas.
Brad Bird, se pone al mando de esta notable cuarta entrega, e iniciándose en la filmación real tras sus exitos en Pixar.
El agente Hunt, es recatado de una prisión. Tras el rescate, inmediatamente se le asigna una misión, pero tras un pequeño fracaso, el enemigo toma ventaja, lo que significa que EEUU, y Rusia, entran en una crisis nuclear. Esta crisis, provoca la activación del Protocolo Fantasma, lo que quiere decir, que todos los agentes de la fuerza FMI, son desactivados, y no tienen permiso para actuar. El pequeño grupo de Ethan Hunt, se ve obligado a actuar para parar los pies al grupo terrorista que ha desencadenado la crisis, pero sin ningún apoyo táctico.
Bird, compone un estupendo blockbuster, donde todo encaja (aunque con alguna licencia como por ejemplo el salto en la ventana del hotel en Dubai, pues cuando vuelve a la habitación, no hay rastro del cristal quitado) a la perfección para darnos un estupendo festival de escenas de acción, humor, espionaje, y todo con coherencia y sin tomarnos por simples borregos viendo explosiones sin sentido. Y es que Bird, ha demostrado no solo ser capaz de ponerse tras las cámaras para dirigir acción real, sino que se consuma con un gran especialista en rodar escenas de acción, algo que últimamente parece resultar difícil de hacer. Sus escenas están rodadas con nervio, y además, al igual que pasa con Los Vengadores, podemos ver todo, sin ninguna trampa de cámara temblando u oscureciendo la imagen.
Los actores elegidos para acompañar a Tom Cruise, también están perfectos en sus papeles. Paula Patton, se ve perfecta en el papel de dura espía, pues no da impresión de fragilidad, ni fisica, ni mentalmente. Simon Pegg, es el contrapunto perfecto de humor para este tipo de películas. Jeremy Renner, resulta convincente como actor de acción, y Michael Nyqvist, se ve como un digno villano. Cruise, a su vez, esta perfecto en un papel que le sienta como un guante, y resulta reconfortante, verle de nuevo correr a toda pastilla tras los malos.
En definitiva, una película muy entretenida, y que recomiendo ver, pues no es ninguna brabocuneria al estilo Bay, pues aunque es una película puramente comercial, no nos trata como a tontos.
Brad Bird, se pone al mando de esta notable cuarta entrega, e iniciándose en la filmación real tras sus exitos en Pixar.
El agente Hunt, es recatado de una prisión. Tras el rescate, inmediatamente se le asigna una misión, pero tras un pequeño fracaso, el enemigo toma ventaja, lo que significa que EEUU, y Rusia, entran en una crisis nuclear. Esta crisis, provoca la activación del Protocolo Fantasma, lo que quiere decir, que todos los agentes de la fuerza FMI, son desactivados, y no tienen permiso para actuar. El pequeño grupo de Ethan Hunt, se ve obligado a actuar para parar los pies al grupo terrorista que ha desencadenado la crisis, pero sin ningún apoyo táctico.
Bird, compone un estupendo blockbuster, donde todo encaja (aunque con alguna licencia como por ejemplo el salto en la ventana del hotel en Dubai, pues cuando vuelve a la habitación, no hay rastro del cristal quitado) a la perfección para darnos un estupendo festival de escenas de acción, humor, espionaje, y todo con coherencia y sin tomarnos por simples borregos viendo explosiones sin sentido. Y es que Bird, ha demostrado no solo ser capaz de ponerse tras las cámaras para dirigir acción real, sino que se consuma con un gran especialista en rodar escenas de acción, algo que últimamente parece resultar difícil de hacer. Sus escenas están rodadas con nervio, y además, al igual que pasa con Los Vengadores, podemos ver todo, sin ninguna trampa de cámara temblando u oscureciendo la imagen.
Los actores elegidos para acompañar a Tom Cruise, también están perfectos en sus papeles. Paula Patton, se ve perfecta en el papel de dura espía, pues no da impresión de fragilidad, ni fisica, ni mentalmente. Simon Pegg, es el contrapunto perfecto de humor para este tipo de películas. Jeremy Renner, resulta convincente como actor de acción, y Michael Nyqvist, se ve como un digno villano. Cruise, a su vez, esta perfecto en un papel que le sienta como un guante, y resulta reconfortante, verle de nuevo correr a toda pastilla tras los malos.
En definitiva, una película muy entretenida, y que recomiendo ver, pues no es ninguna brabocuneria al estilo Bay, pues aunque es una película puramente comercial, no nos trata como a tontos.
miércoles, 2 de mayo de 2012
Los Vengadores
Poco puedo decir que no hayais leído ya sobre esta película, que tras su estreno este fin de semana, no ha hecho otra cosa que acumular público, y críticas elogiosas. Y no les falta razón, el director Joss Whedon, ha conseguido filmar, la que sin duda, es la mejor película Marvel hasta la fecha.
Contiene todo, y en su medida justa, acción, humor, un guión coherente a pesar de estar tratando sobre superhéroes y demás personajes fantásticos,...
Una película que se lleva gestando desde que el primer Ironman viera la luz, y que tras las distintas adaptaciones de otros personajes Marvel (Thor, Capitán América, Hulk), han convergido en esta gran historia, donde se ha juntado a todos, uniendo así el gran rompecabezas, dando protagonismo a todos por igual.
S.H.I.E.L.D. tras la llegada a la Tierra de Loki, va necesitar unir al variopinto grupo de personajes con poderes fantásticos que ha estado estudiando y vigilando todo este tiempo. Loki se ha aliado con un ejercito extraterrestre para apoderarse de la Tierra, y Los Vengadores, tendrán que salvar primero sus distancias para poder enfrentarse a él.
Un argumento fácil, pero sin duda, no facilón, pues guionistas, director, e interpretes, han sabido darle sentido, y convertirlo en algo realista, para darnos este espectáculo en su estado más puro. Era díficil reunir a todos estos personajes y actores, y que todos por igual, tuvieran su momento en la película, y además darle coherencia al conjunto, y Whedon, ha sabido hacerlo. Su mano se nota amante de estos personajes, y ha sabido dirigir muy bien a los actores que los interpretan para resultar convincentes.
Los actores, están que se salen, y tenemos a Robert Downey Jr., Chris Evans, Mark Ruffalo, Chris Hemsworth, Scarlett Johansson, Jeremy Renner, Tom Hiddleston, Samuel L. Jackson, Cobie Smulders, Clark Gregg, Gwyneth Paltrow, Stellan Skarsgård, todos con su momento de gloria.
Escenas de acción memorables, y un gran pulso narrativo de ellas, sin duda de lo mejor en superhéroes de los últimos tiempos. Además filmadas con todo detalle, sin ninguna trampa, es decir, vemos todo, la cámara no tiembla, y podemos admirar desde los golpes de Hulk, a los martillazos de Thor, algo difícil de conseguir sin que quede realista, y Whedon lo ha conseguido.
Y por supuesto, llena de humor, y en su dosis justa. Alucinante el tratamiento de Hulk, la verborrea de Stark, o la forma de ser de Thor y del Capitán América. No voy a desvelar nada, pues perdería su gracia, pero desde luego, hay escenas de este tipo que son para el recuerdo, la sala en la que he visto la película, estaba llena, y en esos momentos, explotaba en carcajadas.
En definitiva, no me voy a extender más, pues no digo nada que no se haya escrito ya. Una película indispensable para los amantes del genero, y para los que no, a lo mejor solo les resulta entretenida, pero creo que eso no es poco.
Contiene todo, y en su medida justa, acción, humor, un guión coherente a pesar de estar tratando sobre superhéroes y demás personajes fantásticos,...
Una película que se lleva gestando desde que el primer Ironman viera la luz, y que tras las distintas adaptaciones de otros personajes Marvel (Thor, Capitán América, Hulk), han convergido en esta gran historia, donde se ha juntado a todos, uniendo así el gran rompecabezas, dando protagonismo a todos por igual.
S.H.I.E.L.D. tras la llegada a la Tierra de Loki, va necesitar unir al variopinto grupo de personajes con poderes fantásticos que ha estado estudiando y vigilando todo este tiempo. Loki se ha aliado con un ejercito extraterrestre para apoderarse de la Tierra, y Los Vengadores, tendrán que salvar primero sus distancias para poder enfrentarse a él.
Un argumento fácil, pero sin duda, no facilón, pues guionistas, director, e interpretes, han sabido darle sentido, y convertirlo en algo realista, para darnos este espectáculo en su estado más puro. Era díficil reunir a todos estos personajes y actores, y que todos por igual, tuvieran su momento en la película, y además darle coherencia al conjunto, y Whedon, ha sabido hacerlo. Su mano se nota amante de estos personajes, y ha sabido dirigir muy bien a los actores que los interpretan para resultar convincentes.
Los actores, están que se salen, y tenemos a Robert Downey Jr., Chris Evans, Mark Ruffalo, Chris Hemsworth, Scarlett Johansson, Jeremy Renner, Tom Hiddleston, Samuel L. Jackson, Cobie Smulders, Clark Gregg, Gwyneth Paltrow, Stellan Skarsgård, todos con su momento de gloria.
Escenas de acción memorables, y un gran pulso narrativo de ellas, sin duda de lo mejor en superhéroes de los últimos tiempos. Además filmadas con todo detalle, sin ninguna trampa, es decir, vemos todo, la cámara no tiembla, y podemos admirar desde los golpes de Hulk, a los martillazos de Thor, algo difícil de conseguir sin que quede realista, y Whedon lo ha conseguido.
Y por supuesto, llena de humor, y en su dosis justa. Alucinante el tratamiento de Hulk, la verborrea de Stark, o la forma de ser de Thor y del Capitán América. No voy a desvelar nada, pues perdería su gracia, pero desde luego, hay escenas de este tipo que son para el recuerdo, la sala en la que he visto la película, estaba llena, y en esos momentos, explotaba en carcajadas.
En definitiva, no me voy a extender más, pues no digo nada que no se haya escrito ya. Una película indispensable para los amantes del genero, y para los que no, a lo mejor solo les resulta entretenida, pero creo que eso no es poco.
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martes, 1 de mayo de 2012
Warhorse: Caballo de batalla
No es la mejor película de Spielberg, pero sin duda, es una gran película.
Llena de todo el cine que este director tan bien sabe hacer, nos llevara desde la amistad que surge entre un niño y un caballo, hasta las aventuras que este último corre en la I Guerra Mundial, en el frente francés. Y corre estas aventuras, porque es arrancado de los brazos de Albert (el niño), para ser convertido en un caballo de batalla, y van pasando de bando en bando, hasta que el destino (o las bombas), lo vuelvan a unir con su verdadero dueño.
Como podéis leer, la película tiene dos partes bien diferenciadas. Una primera, que es donde la amistad surge, y parece que casi no pasa nada (y digo casi, porque es evidente, que la maduración de los dos protagonistas, así como de la historia, se desarrolla), y una segunda, que sin despreciar la primera, es para mi la más interesante, llena de pequeñas historias, todas hilvanadas por Joey el caballo, que se proclama como el autentico protagonista de la historia. Historias que van desde el bando inglés, al alemán a los sufridores franceses. Todas las historias, son interesantes, y la más emotiva la del abuelo francés y su nieta, que se remata en el final de la película, y que no os puedo decir mucho, pero a mi me hizo saltar alguna lagrimilla (normal, Spielberg tiene esa facultad sobre mi, me emociona).
Entre los actores, tenemos a Emily Watson, y Peter Mullan, los dos muy correctos, y con breves pero decisivos papeles. Y a Benedict Cumberbatch, el televisivo Sherlock, al cual se le echan en falta algunos minutos más en pantalla, pues borda su breve papel. Y como pseudo protagonista a Jeremy Irvine, como Albert el niño y que también es correcto. Digo pseudo, pues en realidad, el protagonista absoluto el Joey el caballo, y todo lo que sucede a su alrededor. Solo Spielberg, podía conseguir que un caballo transmitiera tanto, como poder ver su sufrimiento y su amor al ver caído por el agotamiento a su compañero equino de fatigas en el bando alemán.
Y por supuesto, las localizaciones, la fotografía, la puesta en escena (esa bendita aspa de molino, que nos hace más liviano cierto pasaje de la película), la recreación del campo de batalla, una palabra: perfecto.
En definitiva, una película redonda, que aunque no sea la mejor de Spielberg, bien vale su visionado.
Llena de todo el cine que este director tan bien sabe hacer, nos llevara desde la amistad que surge entre un niño y un caballo, hasta las aventuras que este último corre en la I Guerra Mundial, en el frente francés. Y corre estas aventuras, porque es arrancado de los brazos de Albert (el niño), para ser convertido en un caballo de batalla, y van pasando de bando en bando, hasta que el destino (o las bombas), lo vuelvan a unir con su verdadero dueño.
Como podéis leer, la película tiene dos partes bien diferenciadas. Una primera, que es donde la amistad surge, y parece que casi no pasa nada (y digo casi, porque es evidente, que la maduración de los dos protagonistas, así como de la historia, se desarrolla), y una segunda, que sin despreciar la primera, es para mi la más interesante, llena de pequeñas historias, todas hilvanadas por Joey el caballo, que se proclama como el autentico protagonista de la historia. Historias que van desde el bando inglés, al alemán a los sufridores franceses. Todas las historias, son interesantes, y la más emotiva la del abuelo francés y su nieta, que se remata en el final de la película, y que no os puedo decir mucho, pero a mi me hizo saltar alguna lagrimilla (normal, Spielberg tiene esa facultad sobre mi, me emociona).
Entre los actores, tenemos a Emily Watson, y Peter Mullan, los dos muy correctos, y con breves pero decisivos papeles. Y a Benedict Cumberbatch, el televisivo Sherlock, al cual se le echan en falta algunos minutos más en pantalla, pues borda su breve papel. Y como pseudo protagonista a Jeremy Irvine, como Albert el niño y que también es correcto. Digo pseudo, pues en realidad, el protagonista absoluto el Joey el caballo, y todo lo que sucede a su alrededor. Solo Spielberg, podía conseguir que un caballo transmitiera tanto, como poder ver su sufrimiento y su amor al ver caído por el agotamiento a su compañero equino de fatigas en el bando alemán.
Y por supuesto, las localizaciones, la fotografía, la puesta en escena (esa bendita aspa de molino, que nos hace más liviano cierto pasaje de la película), la recreación del campo de batalla, una palabra: perfecto.
En definitiva, una película redonda, que aunque no sea la mejor de Spielberg, bien vale su visionado.
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