La sombra del poder (State of play)

Corrupción, conspiración, política y periodismo, cuando se juntan estos ingredientes, cualquier cosa puede salir, pero en este caso es una más que estupenda película.

Cal MacAffrey (Russell Crowe), es un periodista que investiga un doble asesinato, el de un ladronzuelo y un repartidor de pizza. Su compañera en el periódico, la joven Della Frye (Rachel McAdams), es la que se encarga del blog del períodico, y a la vez esta implicada en un artículo en el que un congresista (Ben Affleck), ha tenido una aventura amorosa con una compañera del despacho, y que a muerto en extrañas circunstancias arrollada por el metro.

Su director Kevin McDonald, es capaz de mantenernos la intriga en todo momento de la película, y en más de una ocasión, nos recuerda al mejor cine de Alan J. Pakula. Un guión muy bien escrito, una magnífica dirección de actores y un buen sentido de ritmo a la película, hace que le salga una película redonda. El film, es una adaptación de una miniserie británica, que sus guionistas han sabido condesar muy bien para el guión de la película. En ningún momento resulta aburrida (como pasa en algunas película del género), y la cantidad de datos que se dan, nunca resultan ser abrumadores, por lo bien que están repartidos a lo largo de las 2 horas de película. Reconozco que soy un fan del género, pero es una película como las de antes, con todos los ingredientes bien mezclados, desde la investigación policial y periodista a la trama de conspiraciones al más alto nivel.

Los giros de la película, están tan bien realizados, que no te das cuenta de las pistas que se van dando a lo largo de la película, hasta que este está realizado.

Por otra parte, las escenas se suceden con un muy buen ritmo, y con unos planos que normalmente no se ven ultimamente (no quiero resultar técnico, pues no lo soy, pero esos planos desde arriba, dan frescura a la película).

Entre los actores, hay que destacar al protagonista, Russell Crowe, y la gran plantilla de secundarios, todos muy bien escogidos, y perfectos en el papel, desde Jason Bateman (desde que lo vi en la serie de TV Arrested Development, sigo su carrera con atención), Jeff Daniels, Robin Wrigth Penn, O Helen Mirren. Sin duda el pero, hay que ponérselo a Ben Afleck, que no resulta muy creíble como compañero de universidad de Crowe, ni como congresista (aún estoy esperando ver el papel que le quede bien a este, de momento para mi, mediocre actor). Y sin duda Crowe esta magnífico, completamente creíble, hace suyo el palpel, digno de un Robert Redford o Dustin Hoffman en Todos los hombres del presidente.

No quiero decir mucho más, para no desvelaros la película. Simplemente, que os recomiendo la película, no resulta en ningún momento aburrida, y esta desarrollada de una manera muy inteligente, sin duda gracias al buen guión.