Space Cowboys

Dirigida, producida y protagonizada por Clint Eastwood, no es más que un puro capricho del director, pero que como casi siempre, supo plasmar no solo su sello personal filmando, sino llegar a transmitir entretenimiento, que no es ni más ni menos lo que Eastwood buscaba.

Frank Corvin, es un veterano piloto que estuvo a punto de salir al espacio como uno de los primeros astronautas, pero su cabezonería, dio al traste con uno de sus mayores sueños, y de todo el equipo Dedalus del que él era parte. 40 años después, uno de sus diseños de guiado de satélites, esta dañado, y pertenece a la antigua Unión Soviética. Ningún ingeniero ni astronauta actual, es capaz de comprender un diseño tan arcaico, por lo que la NASA, se decide a volver a juntar al equipo Dedalus, y a pesar de estar todos ya en la tercera edad, mandarlos al espacio a reparar los daños y evitar que el satélite de grandes proporciones ruso caiga a la Tierra.

En muchos sitios, podéis leer que se trata de una de las obras menores de Eastwood, y quizá es cierto, pero aún con todo esta muy por encima de la media de las películas de este tipo, sabiendo conjugar muy bien momentos cómicos, ingeniosos diálogos y acción. Todo ello, no solo para reivindicar el papel de nuestros mayores, sino como he dicho al principio, por puro entretenimiento, no solo de su director, sino también de espectador. Y es que es uno de los sello característicos de Eastwood: no aburrir, y aunque a partir del último tercio la película gira desde la comedia al más puro cine de acción en el espacio, el interés no se pierde, y no hace desmerecer al conjunto.

Eastwood, supo rodearse de buenos amigos que le acompañaran en esta aventura, y además, eligió actores de gran calidad. Tenemos a un estupendo Tommy Lee Jones, un gran Donald Sutherland desatando todo su vis cómica, y en un segundo plano un correcto James Garner. El propio Eastwood, como siempre, es otro de los que esta genial en la película.

Unas escenas de acción más que correctas, con unos buenos efectos especiales, y más aún sabiendo que contó con un limitado presupuesto. Planos que destacan por la belleza de sus imágenes, y que para todo aficionado a las aventuras espaciales son muy recomendables a pesar de contar ya con cerca de 15 años.

En definitiva, una película para dejarse llevar, donde sabes que todo lo que se nos cuenta es imposible que pase en la realidad y que además contiene un montón de fallos científicos sobre todo en su última parte. Muy recomendable como pasatiempos con una cierta calidad, y mucho entretenimiento, de esas películas para ver de vez en cuando.