De nuevo, Alex de la Iglesia, nos regala una película llena de excesos, fantasía, y mucho humor, donde la película triunfa, hasta un desenlace que hace que baje unos cuantos enteros.
Un par de parados, realizan un atraco a una tienda de Compro Oro disfrazados de mimos de la calle. En su huida, son perseguidos por la policía, y por la ex mujer de uno de ellos, pues no se le ha ocurrido otra cosa, que realizar el atraco con su hijo de 10 años. Quieren llegar a Francia, pero en su viaje, han de atravesar uno de los pueblos con más leyenda sobre brujas, Zugarramurdi, y por supuesto, estas harán acto de presencia.
Podríamos decir, que esta película nos retrotrae directamente a aquella fantástica El día de la Bestia, pues el esquema es muy similar, lo mismo que el tono total de la misma. Tenemos gags delirantes, unos correctos efectos especiales, situaciones inverosímiles, pero muy cómicas, un guión contenido (salvo en su tramo final), y un elenco actoral que ha sabido estar a la altura. De hecho, viendo la película con mi mujer al lado, no hacia otra cosa que decirle lo bien que se lo tenían que haber pasado rodando la película, y eso es algo que llega a transmitirse a través de la pantalla. Cierto es que peca de una cierta misoginia, que si bien en un principio tiene cierta gracia, tengo que darle la razón a mi mujer cuando me comentaba que se estaban pasando con las mujeres. Aún con todo la película es un disfrute, y esos pequeños errores, se pueden pasar por alto.
Entre los actores, tenemos a una estupenda pareja protagonista, llena de química: Hugo Silva, que lo hace francamente bien, y un Mario Casas, al que el personaje le sienta como un guante. Pero también tenemos otros personajes con unas subtramas de lo más interesante, véase por ejemplo, la pareja formada por Pepón Nieto, y Secun de la Rosa. Son comedia pura, y pagaría mi entrada de cine por ver un spin off de estos dos personajes. Pero también tenemos a mujeres, aunque en su mayoría brujas, como Carmen Maura, Terele Pavez, Macarena Gómez, y Carolina Bang. Y casi como cameos, tenemos a Santiago Segura y Carlos Areces. Por cierto, Jaime Ordoñez, también lo hace francamente bien.
Como he dicho antes, si algún pero hay que ponerle a la película, además de cierta misoginia, es el tramo final. Si a lo largo de la película, todo resulta bastante interesante, lleno de situaciones graciosas, y diálogos ingeniosos. Al final de la película, todo se vuelve excesos, y la brujería toma el control de la película, llenándolo de efectos digitales (bien hechos, eso sí), y restandole algo de personalidad a la película. Aunque me vuelvo a repetir, merece la pena verla, aunque solo sea por el tramo que lleva hasta ese final.
Si te gusta la comedia mezclada con el terror y el fantástico, no te puedes perder esta película donde casi todo es posible, y que te asegura pasar un buen rato lleno de risas y sorpresas, la recomiendo.
1 comentario:
estamos de acuerdo en casi todo, yo pienso que te puede recordar más a "Abierto hasta el amanecer" en su estructura que a "El dia de la bestia", en cuanto a que se pierde calidad segun acaba totalmente de acuerdo. Y por la fama de director super exigente que tiene de la Iglesia dudo mucho que lo pasaran bien en el rodaje, pero por lo menos ha conseguido algo que no había conseguido hasta el momento, que pagara por ver una peli con Mario Casas, y encima que gustara como lo hace :)
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