Excelente drama judicial, protagonizado por Tom Cruise, Jacck Nicholson y Demi Moore, dirigidos por Rob Reiner, con un guión de Aaron Sorkin, de un lejano ya 1992.
Merece la pena rescatar las películas buenas, y esta lo es. Una intensa investigación, con un gran guión, que nos da unos de las mejores escenas de juicios que se han escrito (aquella en la que Nicholson se enfrenta a Cruise en el juicio).
En la base militar americana de Guantanamo (Cuba), aparece uno de los soldados muertos, tras lo que parece un código rojo (acción ejemplarizante que busca castigar al infractor con una cruel novatada). Todo apunta a dos de los marines que llevan a cabo este código rojo, pero ellos se escudan en que obedecieron ordenes. Su defensa recae de uno de los abogados de la marina más novatos, pero a la vez más prometedor, el teniente Kaffe (Tom Cruise), la investigación del caso, le lleva hasta el coronel de la base Guantanamo, Nathan Jessup (magistralmente interpretado por Jack Nicholson), lo que le llevara a estar entre la espada y la pared.
No solo el guión es lo bueno de la película, sino que la dirección y los actores, están en plena forma. Rob Reiner, compone la película de una manera tal, que la tensión y el ritmo, no decae en ningún momento, ni siquiera en las escenas del juicio, que es donde más interesante se pone la película. Y los actores, también bordan su papel. Tom Cruise, seguramente, no volverá a interpretar de la manera en que lo hizo en esa película, seguramente porque tampoco le llegan papeles de ese tipo. Y eso que sabéis, que soy defensor de su trabajo (que no de su vida privada, la cual me importa un pepino), y reconozco que ha seguido haciendo buenos papeles, pero que no ha llegado al nivel de esta película. Por supuesto, Nicholson, esta que se sale, y encuentra en Cruise, un perfecto oponente para su duelo interpretativo, y es este otro gran exito de la película. También tenemos a Demi Moore, que no esta nada mal, sobre todo pensando en sus carencias como actriz. Y como grandes secundarios, tenemos a Kevin Pollack, y a Kevin Bacon, los dos perfectos como siempre en sus papeles, y grandes robaescenas, con el problema de que los protagonistas, también están a un alto nivel. Kiefer Sutherland, también aparece, de jovencito, y también borda su papel de marine entregado a su coronel.
En lo más profundo, quizá se puede atisbar cierta crítica al mundo militar, aunque no es del todo cierto, pues se hace muy de soslayo (¿se dice así?), machacando a ciertos personajes, pero ensalzando a otros.
En definitiva, una película prácticamente redonda, y que merece la pena verla , no una sino varias veces, pues cada vez que se ve, se disfruta, y por supuesto si nunca la has visto, no puedes perder más tiempo en verla.
Ficha de la película en Sensacine aquí.
5 comentarios:
Quizás una de las mejores pelis de Tom Cruise un buen clásico que nunca cansa de verlo.
La escena del código rojo en el estrado con Jack Nicholson pasará a la historia, además estaba mi adorado Aaron Sorkin (El Ala Oeste de la Casa Blanca) al guión, gran película.
De las más grandes. Como dices, conjunción de elementos brillantes. Me encanta el cliffhanger, cuando Tom Cruise, armado de un bate para ordenar sus ideas, dice la víspera del interrogatorio a Nicholson que la estrategia es hacer que este confiese. Cuando le preguntan sus compañeros cómo piensa hacerlo, él contesta: "No tengo ni idea". Sorkin en estado puro. Genial!)
La época en que veías a Tom Cruise y sabías que en la interpretación se dejaría la piel.
Un abrazo.
Carlos: es para rescatarla de vez en cuando.
Satrian: genial la escena de la que hablas, de lo mejor de la película. Menudo enfrentamiento.
Perplejo: Sorkin es de lo mejorcito en cuanto a escribir historias.
Work: te doy la razón.
Saludos a todos, y disculpar la tardanza en responder.
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