El lado bueno de las cosas

Comedia romántica  con un pequeño disfraz de drama, que se hace muy entretenida y te deja con la mirada fija en la pantalla para ver como acaban las cosas.

Se puede ver como que fue una de las perdedoras de l noche de los Oscars, pero sin duda, fue una de las ganadoras. Vale que solo recogió el premio la actriz protagonista, Jennifer Lawrence, de las ocho nominaciones a las que optaba. Pero precisamente esas ocho nominaciones, ya son un premio, pues hace ya treinta años, que no se daban en una misma película las nominaciones de todo el elenco protagonista, incluidos los secundarios, así como director, guión, y director. Por lo tanto, para mi ya triunfo en la preceremonia.

Y es que su punto fuerte, son las grandes interpretaciones, y un guión sólido, así como la dirección. Y aunque solo flaquea algo en su arco final, para mi es totalmente salvable, pues no deja de ser una comedia romántica  con algo más de trasfondo y drama.

Pat (Bradley Cooper), es un enfermo mental, que tras pasar ocho meses en una institución mental, derivados de un episodio violento con su mujer, vuelve a casa de sus padres. Esta decidido a encarrilar su vida, y poder volver a conquistar a su mujer, cuando se cruza en su camino Tiffany (Lawrence), una mujer que acaba de perder a su marido, y utiliza el baile como manera de superarlo. Mutuamente se ayudan, pues Tiffany, es hermana de la mejor amiga de la exmujer de Pat, y Pat, le ayuda con el baile, siendo su pareja en un concurso semiprofesional de baile.

Contiene escenas para todos los gustos, desde el poder desternillarte de risa, como el momento de la bolsa de basura, hasta el profundo drama, a pesar de quedarse en la superficie de lo que realmente supone esta enfermedad para la familia que la padece. De hecho, todos parecen tener cierto nivel de locura, pues el protagonista, esta claro, y sufre bipolaridad, pero el padre de Pat (Robert de Niro), parece un manatico esquizofrenico, Tiffany, padece una depresión que le lleva a cometer cierto tipo de locuras, y convertirse en una persona antipática, y la madre de Pat, pues es la única que parece de adorno, pero consiente todas las locuras que acontecen a su alrededor.

Y desde luego, merecidas tienen las nominaciones al Oscar, todos los actores, pues Cooper, demuestra lo buen actor que puede ser, encarnando a un tipo perdedor, completamente creíble, a pesar de su estatus en la vida real. Lawrence, esta perfecta en el papel. De Niro, hacía mucho tiempo que no destacaba de esta manera en su trabajo como actor, y Jacki Weaver, hace de perfecta madre, resignada a todo lo que le pasa en su familia. Chris Tucker, no esta nominado, pero pone un punto de comedia que se agradece.

En definitiva, una gran película, que funciona de verdad como comedia, y como drama, con un gran trabajo actoral y de dirección por parte de David O. Russell. La recomiendo sin lugar a dudas.