miércoles, 27 de junio de 2012

Hollywoodland

Gracias a que en este país, hemos ganado dos canales de cine en TDT en abierto, he podido ver esta película, que seguramente no me habría planteado ni ver. En concreto fue en Paramount Channel, donde cada vez hay una programación mejor.

Y me lleve una grata sorpresa con este film, que me engancho desde el principio, con esos aires a cine negro, que no acaban de explotar definitivamente a lo largo del metraje, pero que aún con todo resulta interesante y entretenida.
La película juega entra la realidad y la ficción. Busca un motivo para que George Reeves, el primer actor en encarnar a Superman en una serie de Tv, muriera repentinamente. Supuestamente, fue un suicidio, y esa es la versión oficial, pero aquí, el director del film, Allen Coulter, nos da otras visiones, sin acabar de concretar una de ellas, quedándose un final abierto, y conclusión, algo que creo es un fallo.  Louis Simo (Adrien Brody), un detective de poca monta, recibe el encargo de investigar la muerte de Reeves, varios años después. En su investigación, se da cuenta de Reeves, tenía relaciones con varios personajes muy influyentes del Hollywood de entonces, lo que hará que se plantee la duda sobre suicidio o asesinato, además, para Simo, llega a convertirse en una obsesión.
Para el papel de Reeves, tenemos a un Ben Affleck, que ha firmado uno de sus mejores momentos a lo largo de carrera. Y es que se funde con el personaje, y llega a transmitir de un modo muy realista, empatizando mucho con el espectador, y logrando que le cojamos un gran cariño al personaje. Y desde luego, este es uno de los puntos fuertes de la película, la recreación de los personajes. Al contrario de lo que pudiera parecer, no hay un verdadero propósito por esclarecer el suicidio, o meterse de lleno en el cine negro, sino que lo que se pretende es contar varias historias en paralelo y como hilo conductor, utilizar la tragedia del actor, y la investigación, y la vida del detective Louis Simo.

En cuanto a los actores, están esplendidos, empezando por un perfecto Adrien Brody, una insuperable Diane Lane, y un no menos Bob Hoskins. Además, como ya he comentado, Affleck, ha subido un nivel su interpretación, y lo borda como Reeves.
La recreación de la época, también es notable, y es un buen acompañamiento en el film.

En definitiva, no es una gran película del genero negro, pero si es muy entretenida e interesante, y si tenéis la oportunidad de verla en otro pase por la cadena, no lo desaprovechéis.
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